Fragmentos selecionados (VO):
,,
La atención al “historial” de la arquitectura objeto de la intervención -a la vista de las soluciones dadas- en tantas ocasiones parece haber brillado por su ausencia. El olvido es todavía mayor cuando la intervención no es directa sobre una arquitectura de valor patrimonial sino sobre el lugar del que forma parte inescindible y cuyas consecuencias le van a afectar en mayor o menor medida, cuando por otra hace ya tiempo que en el mundo de la restauración se ha aceptado que lo que se entendía como el estricto campo de actuación referido a una arquitectura concreta, debe alcanzar al ambiente construido en el cual se encuentra.
,,
Hay una norma fundamental y que lo resume: ante el monumento él mismo es el maestro; y toda buena restauración – para quien estudie profundamente el monumento, y lo interrogue con seriedad de histórico, con pasión de artista, con amor de arquitecto- se determina particularmente desde él. Es aquella teoría del caso por caso que atiende eminentemente a la realización, pero que requiere un complejo y delicado sentido de estudio, de gusto, de sinceridad, y de equilibrio: en una sola palabra: de armonía»
,,
La gran cantidad de arquitecturas del pasado que se encuentran en esta situación y la necesidad de acomodarlas a nuevos usos ha multiplicado hoy en día este tipo de actuaciones, precisamente en un momento en el que abundan determinadas posturas acerca de la intervención sobre dichas arquitecturas que contradicen, de modo discutible por decirlo de algún modo suave, las lógicas, formales, espaciales, materiales, etc., propias a las mismas.
,,
Hasta no hace tanto tiempo el arquitecto se formaba aprendiendo con la experiencia histórica, de tal modo que se enfrentaba con conocimiento y naturalidad cuando tenía que actuar sobre arquitecturas del pasado; una actividad que veía como una parte connatural de su oficio. Un arquitecto al trabajar sobre una arquitectura anterior la hacía en buena medida suya, intentaba comprenderla y aplicaba todos sus conocimientos en continuar su existencia adecuándola a las necesidades del tiempo.
,,
En las arquitecturas del pasado podemos verificar con claridad el hecho de que todas ellas han nacido de un modo u otro de la reflexión sobre la experiencia histórica de la arquitectura anterior, haciendo operativa dicha experiencia histórica. La reflexión sobre la historia que hace la arquitectura al acercarla de nuevo al presente, tiene en cada caso como uno de sus objetivos más importantes el devolverle el sentido, dándole un nuevo significado de acuerdo con las nuevas circunstancias de tiempo y de lugar en las que se produce.
,,
Pero sobre todo no hay que olvidar que el concepto de lugar en la arquitectura, no ha sido siempre el mismo y que como tal concepto ha tenido un desarrollo histórico propio. Sin ir más lejos, desde nuestra perspectiva histórica concedemos un papel de primera magnitud a la experiencia del lugar en la existencia real de una arquitectura determinada. Consideramos que existe una relación inseparable entre arquitectura y lugar, de tal modo que aquélla no tendría una existencia independiente de éste, es decir, que la arquitectura únicamente alcanza su más completo sentido en la construcción del lugar y por extensión en la construcción de la ciudad. Consideración importante cara al siguiente tema que tratará de las transformaciones que acaecen a las arquitecturas del pasado a lo largo de su devenir histórico.